Las últimas investigaciones de la Universidad de Microsoft y Carnegie Mellon revelan el impacto potencial de las herramientas de inteligencia artificial (IA) en la capacidad de pensamiento crítico de las personas. A través de una encuesta de 319 trabajadores del conocimiento, el equipo de investigación recopiló 936 casos reales de uso de IA generativa en múltiples industrias como TI, diseño, administración y finanzas, y analizó profundamente seis dimensiones de pensamiento crítico: conocimiento, comprensión, aplicación, análisis, síntesis y evaluación.

El estudio encontró que la mentalidad de los trabajadores del conocimiento cambió significativamente después de usar herramientas de IA. Primero, ya no recopilan información de forma independiente, sino que enfocan su enfoque principal en verificar los resultados generados por la IA. En segundo lugar, prefieren integrar las respuestas proporcionadas por AI en lugar de desarrollar soluciones de forma independiente. Finalmente, muchas personas comenzaron a recurrir a monitorear los sistemas de IA en lugar de realizar tareas directamente. Esta tendencia es particularmente evidente cuando se trata de tareas convencionales o menos importantes, lo que lleva a las personas que pueden depender demasiado de la IA sin cuestionar, lo que plantea preocupaciones sobre la dependencia a largo plazo y la capacidad reducida para resolver problemas de forma independiente.
El equipo de investigación propuso un fenómeno de "ironía automatizada": aunque la IA procesa tareas diarias para reducir la carga laboral de las personas, también priva a las personas de la oportunidad de ejercer su juicio y sus "músculos cognitivos". Este fenómeno de la "subcontratación cognitiva" puede debilitar gradualmente las habilidades naturales de las personas, especialmente en escenarios en los que se requiere pensamiento independiente y resolución creativa de problemas.
Curiosamente, la investigación también encontró que la autoconfianza puede proteger la capacidad de pensamiento crítico de las personas hasta cierto punto. Los empleados que tienen más confianza en sus habilidades tienden a ser más escépticos sobre la producción de IA. Aunque los investigadores no pueden determinar claramente la relación causal de esta relación, tres factores principales impulsan el pensamiento crítico de las personas: el deseo de mejorar la calidad del trabajo, la motivación para evitar errores y la necesidad de desarrollo personal. Sin embargo, las presiones de tiempo, la falta de conciencia de problemas y la dificultad para mejorar las respuestas de IA en áreas desconocidas son obstáculos para esta capacidad.
La investigación sugiere que las empresas deberían abogar activamente del pensamiento crítico de los empleados y enseñarles cómo revisar los resultados de la IA a través de una capacitación especializada. Al mismo tiempo, las herramientas de IA deben estar diseñadas para respaldar en lugar de reemplazar el pensamiento crítico para garantizar que las personas puedan mantener la capacidad de pensar de forma independiente mientras disfrutan de la conveniencia de la tecnología.
Además, un estudio independiente de la escuela de negocios suizo encontró que los jóvenes de 17 a 25 años tenían la mayor proporción de usar herramientas de IA, pero obtuvieron la puntuación más baja en las pruebas de pensamiento crítico. El nivel educativo también se ha convertido en un factor protector importante, con personas con educación superior cuestionando con mayor frecuencia la información generada por la IA y manteniendo un pensamiento crítico más fuerte mientras usan herramientas de IA.
Enlace en papel: https://www.microsoft.com/en-us/research/publication/the-impact-of-generative-ai-on-critical-thinking-self-reported-reductions-ing--cognitive-effort-and-confidence- efects-from-a-survey-of-knowleders-workers/
Enfoque de investigación:
La investigación muestra que la dependencia excesiva de las herramientas de IA puede conducir a una disminución en la capacidad de pensamiento crítico.
Los trabajadores tienden a verificar los resultados de la IA en lugar de pensar de forma independiente o resolver problemas.
La autoconfianza y el nivel educativo se consideran factores importantes para mantener el pensamiento crítico.